top of page
  • Art Box

Most Dangerous City: la banda más peligrosa y energética de Tegucigalpa

Por: P.M.

 

¿Qué es mejor que escuchar música? Trabajar haciendo canciones, por supuesto. Eso fue obvio para Martha Bonilla y a John Paul Lakes desde muy temprano en sus vidas.

Ella estudió en conservatorios de música en Tegucigalpa y sacó un curso de producción musical en Los Ángeles. Él, por su parte, supo que desde que estaba en el colegio quería dedicarse a la música, por lo que estudió la carrera de Ingeniería en Sonido en Estados Unidos. Ambos formaron Most Dangerous City, una banda descrita como divertida, limitless e irreverente, para poder expresar sus toques individuales y compartir su amor por la música con el mundo.

 

Okay, pero, ¿cómo nació este proyecto? Los dos se conocieron gracias a un reconocido productor hondureño, Trooko, hace diez años. Acid Monkey, como solía llamarse antes, invitó a varios solistas para aparecer en el álbum, incluyendo a Martha y JP. “Ahí nos conocimos, pero sólo nos conocimos”, expresa Martha. Ella explica que formaron una amistad esa vez ya que su, ahora compañero, vivía en San Pedro Sula. “Cuando él se vino a Tegucigalpa nos comenzamos a ver en los eventos culturales de aquí y así iniciamos a hablar de música y cosas así”.


 

En ese tiempo la cantante estaba full time con nuestros amigos de Boreal Scala, donde llegó a trabajar Lagos. Ellos poco tiempo después empezaron a hacer jams juntos: “Siempre me gustaba el estilo de JP”, manifiesta la rockstar, “Ya habíamos hablado varias veces sobre hacer una canción, entonces nos reunimos a trabajar en una. ¡Hicimos el single y quisimos hacer muchos más!”. A partir de ese momento ambos formaron una banda sin quererlo. En 2019 lanzaron su primer sencillo, Bad Batch, y poco a poco sacaron más canciones indie electronic este año.

 

Escogieron la nombre muy peculiar para su grupo, ¿no crees? El origen es un poco caótico, de hecho. Martha decidió tomar una siesta un día, en el que justo les tocaba grabación, y cuando despertó vio que había una protesta afuera de su casa: fuego, calles cerradas… lo típico que pasa en una manifestación en el centro de Tegucigalpa. “Fue un tiempo en el que habían bastantes protestas. Ese día no pudimos ir a grabar, así que nosotros quedamos, como, qué difícil es hacer música con todas las ondas que pasan acá. ¡Qué frustrante vivir en the most dangerous city!”, confiesa JP. Aunque comenzó como un chiste, les pareció un cool name para la banda y se quedó.

 

Pero no se detuvo ahí. El dúo analizó bien el nombre y quisieron evolucionar su significado: “Vivimos en una ciudad que bastante gente considera que es un lugar súper peligroso. ¿Cómo podemos hacer para darle otro punto de vista?”, se cuestionaron. Lo hicieron con su música, en efecto. Usaron la capital como parte de su inspiración musical y la incluyeron en su parte creativa para sacar todo lo positivo de ella. “Tegus es una ciudad con contexturas únicas. En vez de tenerle miedo nos aprovechamos de eso para convertirlo en una textura interesante para nuestros visuales”, aclara Bonilla.

 

Ya que estamos en lo del proceso creativo, hablemos del proceso de creación de las canciones. A pesar de que Martha escribe la mayoría de las letras, ambos planean el concepto de los sencillos. “Discutimos el contexto antes de comenzarlo a escribir. Le hago varias preguntas a JP y él me da su input de cómo lo siente, desde ahí me inspiro a escribir, no sólo desde mi punto de vista, la de él también”, declara ella. Lagos trata de mantenerse más en la parte de producción. En cambio, tienen diferentes métodos para encontrar el sonido de sus canciones: a veces Juan Pablo tiene listas las pistas o ellos trabajan juntos en los jams y es por eso que cada canción tiene una identidad diferente. “Fire es algo de moverte y sentirte en conexión con las personas; Blood Diamond lo sentimos como algo bien poderoso, los sonidos que estábamos poniéndole se sentían como de combate”, expone la solista.

 


Aunque se les categoriza en el género indie electonic, la banda tiene varias influencias musicales: desde el trap, electronic, y house, hasta el electro pop e indie. “Los dos venimos de backgrounds musicales diferentes entonces la unión de los dos ha creado el sonido especifico de nosotros”.


 

A principios de 2020 su idea era ir sacando un track al mes, sin embargo, el COVID-19 llegó al país. Ellos decidieron esperar y ver los cambios que se desarrollaban en el mundo para planear su nuevo itinerario. Su más reciente canción, Blood Diamond, no la iban a lanzar sino hasta tiempo después, mas los acontecimientos actuales los hizo cambiar de opinión. “Justo antes del encierro filmamos un vídeo que era, tipo, súper fun party pero no nos pareció indicado sacarlo ahorita con las protestas de BLACK LIVES MATTER y lo del código penal de aquí. Nos parece fuera de lugar”, dice Martha.

 

Y es que para ellos es sumamente importante hablar de temas que afectan a la sociedad, como la igualdad de derechos humanos, el apoyo a la comunidad LGBT, entre otros. Según el dúo, son afortunados de poder hacer música y expresar lo que sienten a través de ella. “Creo que parte de la responsabilidad social”, reclama el productor, “dentro del contexto hay que brindar un mensaje positivo y dar nuestro punto de vista de cómo deberían ser las cosas”. Volviendo a Blood Diamond, este tema narra una historia de la búsqueda de tu poder, sobre quién te lo quitó, pero igualmente se puede aplicar a otros conceptos, como el reclamo de los derechos y la justicia.

 

Cabe mencionar que tienen una canción en colaboración con Tux Lunan. Ésta surgió de la idea de experimentar con otros backgrounds musicales. “Platicamos con ellos y les pedimos los acapellas e hicimos un remix, yo escribí otra letra para grabarla, fue súper. La idea es seguir colaborando con otros artistas”, manifesta Bonilla.

 

Asimismo, han tenido la oportunidad de tocar en vivo en diversas ocasiones. Su primer toque fue en el Nu Fest en diciembre, junto a otras bandas de Centroamérica. Luego tocaron en San Pedro Sula y Utila. En año nuevo hicieron un surprise gig en el rooftop del Hotel La Ronda de Tegucigalpa, lo cual describen como una experiencia extraordinaria. Además, estuvieron en El Toquín de Alta Cultura como invitados especiales.




 

¿Qué viene para el futuro? Tienen unas canciones que ya están producidas y están listas para lanzarse. Al mismo tiempo, también están produciendo nueva música. “Ahorita estamos trabajando con un amigo de Los Ángeles que hace realidad virtual y pensamos hacer un 360 virtual reality… así como un concierto digital pero eso llegará bastante tiempo”, agrega John Paul.

 

¡Es magnífico apoyar la industria de la música hondureña! El dúo motiva a los músicos nuevos a no dejarse desmotivar por la condición actual del país y a seguir adelante con su música: “Estábamos en una situación en la que yo decía que no valía la pena lanzar música pero Martha me convenció que sí era necesario porque la gente necesita ese contenido; la música ayuda bastante a las personas a entretenerse. Hagan más música, no esperen ‘el momento’. Cuando terminen, hagan otra y láncenla. Y así”, expresa JP. Por su parte, Martha incita a los newcomers a aprovechar su tiempo para hacerse mejores y producir más.

 

Ve la Galeria:


 

¿Quieres saber más de ellos? Síguelos en sus redes sociales. Encuéntralos en como @mostdangerouscity y en Facebook como Most Dangerous City.

 

429 visualizaciones

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page